Una nueva receta y una nueva protagonista que ya forma parte de la sección de artistas invitados.
Antes de entrar en materia y, dejaros la receta que hoy elabora Eva, quiero aprovechar esta entrada para manifestarle mi infinita gratitud, por la acogida y el entusiasmo que demuestra para este blog y con cada una de las publicaciones que aparecen.
Eva, amante de una buena mesa, es de esas personas increíbles: extrovertida, alegre, simpática, dinámica, atenta, detallista, cuenta con un montón de virtudes más, y, además ¡le gusta hacer pan!, aunque sus estudios, baile, chelo y otras ocupaciones más, no le permitan practicar mucho. Ha llegado, y ha ocupado un lugar importante en mi corazón y os aseguro que cuando la conoces te cae bien, sin remedio. Agradezco que se haya atrevido a participar con su receta, y os garantizo que su tiramisú está muy, muy, muy rico, porque lo he comido.
Con estas cantidades os sale una cantidad generosa, así que invitar a amigos o vecinos para que lo pruebe, o si prefieres darte un atracón, y no compartirlo, al menos, luego sal a andar o a correr, para desgastar un poquito.
Aquí tenéis su receta y sus anotaciones.
Ingredientes:
Para aproximadamente 8-10 personas:
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4 claras de huevo
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4 yemas de huevo
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140 gr de azúcar blanco
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1 kg de Mascarpone
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Bizcochos de soletillas (unas 24 unidades)
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Café (aproximadamente 120 ml)
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Ron (opcional)
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Cacao en polvo
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Canela en polvo (opcional)
Elaboración:
Primero, se separan las claras de huevo de las yemas y se montan al punto de nieve. Cuando estén listas, se dejan en la nevera mientras se prepara el resto de la receta.
Se mezclan las yemas de huevo con el azúcar (yo pongo poco azúcar porque si no me parece excesivamente dulce, pero al gusto), para toda la receta uso batidora de varillas.
Una vez esté bien mezclado las yemas con el azúcar, se añade el mascarpone. Se va incorporando poco a poco hasta conseguir una consistencia espesa. Es posible que no sea necesario utilizar toda la cantidad de mascarpone indicada, es más importante la consistencia que el peso, el cambio de una mezcla líquida a la adecuada se aprecia y se nota con facilidad y no hace falta añadir más mascarpone si espesa antes, pero yo sólo he conseguido la consistencia deseada con estas cantidades de ingredientes. Las claras montadas se añaden en este momento, para darle un tono más blanco y una textura más esponjosa, moviendo las varillas con la mano, sin batir.
Posteriormente, se elige el recipiente donde lo queremos presentar. Yo normalmente uso un tupper de cristal grande, para poder dejarlo tapado dentro de la nevera e incluso transportarlo fácilmente; pero por el bien del blog, esta vez he decidido usar un molde desmontable y luego emplatarlo.
Una vez elegido el recipiente, se mojan los bizcochos de soletilla uno a uno en una mezcla de 1 parte de ron y 3 partes de café (se puede aumentar o disminuir cada una en función de los gustos) y se van colocando alineados en la base del recipiente, como se ve en la foto.
Después de la capa de bizcocho, se pone una capa de mascarpone y encima de la misma se espolvorea el cacao por toda la superficie. Se repite este proceso tantas veces como se quiera o en función de la altura del recipiente. La última capa debería ser de mascarpone, y se espolvoreará más generosamente de cacao (yo también espolvoreo un poco de canela porque me gusta el regustillo que deja). ¡Y listo! Lo ideal sería mantenerlo en el frigorífico unas 12 horas antes de sacarlo, para tomarlo bien frío y que se endurezca más. Espero que os animéis a hacerlo, es una receta fácil y bastante agradecida.
Anotaciones:
- Los bizcochos de soletilla que uso son blandos, no he probado los duros para ver cómo queda, pero supongo que si usáis esos necesitaréis mucho más líquido para que no pierda jugosidad la capa de bizcocho.
- Mientras se bate el mascarpone puede que veáis muchos grumitos, la verdad es que a mí me pasa a menudo pero luego al estar en el frigorífico se queda todo lisito así que tampoco lo bato mucho, porque si no también pierde algo de consistencia.
- El tiramisú, originariamente, creo que se hace con Amareto, pero también lo he visto tanto con ron como con whisky. Estoy acostumbrada a usar ron, la verdad es que no sé muy bien por qué, pero también lo he hecho con whisky y está igual de bueno.
[…] de este tartar, y a Eva, que ya se estrenó como artista invitada con su receta de tiramisú , que le dió apoyo e indicación para las […]