Carrilleras a mi manera o mejor dicho a la manera del autor de la receta. «Tripite» como artista invitado y hasta ahora lleva la plusmarca en esta sección. Si alguien más se anima lo acogeré con mucho cariño.
Jesús, más conocido en los círculos familiares como Jesusín, mal que le pese, algo impuesto desde su nacimiento, como modo de distinguir a los Jesuses que integran a ésta, mi familia, a la que de forma aleatoria fuimos agregando, maridos, suegro, cuñados,sobrinos, con la particularidad de que todos compartían el mismo nombre. Así que en una reunión familiar, cuando alguien dice: Jesús, además de contestar «achís», puede responderte un coro de voces diciendo «qué». Como somos muy originales, y para distinguirlos unos de otros, los nombramos como Jesús el mío, Jesús el tuyo, Jesús el nuestro, Jesús el de la «fulanita» Jesús el abuelo…, y ya a falta de pronombres y emparejamientos, decidimos añadir el diminutivo para el entonces pequeño de la familia. Hoy el pequeño es un tiarrón y, a pesar de que el diminutivo le queda poco adecuado, los años lo han convertido en tradición y, me temo, que así lo seguiremos llamando per saecula saeculorum.
A lo que iba, que me pierdo en disertaciones profundas de interés público, y no voy a lo que realmente nos interesa.
La carrillera o carrillada, puede ser de cerdo o de ternera, es el corte de carne que se encuentra a los lados de la cara del animal. Es una carne magra con mucha gelatina, debido al alto contenido de colágeno que posee, lo que aportará al guiso una vez cocinada una textura suave y casi fundente. Esta carne necesita una cocción lenta y prolongada, tras la cual obtendremos como resultado una carne muy tierna y agradable al paladar.
Ingredientes:
1 Kg. de carrilleras de ternera
1 puerro
1 tomate
5 ó 6 zanahorias
6 a 10 champiñones (dependiendo del tamaño)
2 dientes de ajo
Aceite
Harina
Sal
Pimienta
Perejil
Salsa de Soja
1 pastilla de caldo
1 vaso de vino blanco
1/2 litro de agua
Elaboración:
Cortar las carrilleras en trozos grandes.
Pelar y cortar en rodajas las zanahorias y el puerro. Trocear el tomate y los champiñones y picar el ajo. Reservar.
Salpimentar las carrilleras y enharinarlas.
Cubrir el fondo de la olla exprés con aceite y poner al fuego. Freír la carne en el aceite para que quede sellada.
Cuando esté dorada, añadir el ajo picado y el perejil fresco. Rehogar durante unos cinco minutos e incorporar el puerro, las zanahorias, el tomate y los champiñones. Seguir rehogando con la verdura hasta que esté bien pochada.
Añadir el vaso de vino blanco, un poquito de salsa de soja y la pastilla de caldo. Remover y dejar que evapore el vino.
Cubrir con el agua, y cerrar la olla exprés. Cuando la válvula haya subido, bajar el fuego al mínimo y dejar cocer durante 15 minutos.
Pasado el tiempo, retirar del fuego. Dejar que la olla enfríe y pierda la presión para poder abrirla.
Abrimos la olla y servimos las carrilleras.
Se pueden acompañar con arroz blanco, patatas fritas o cocidas.
Y si el guiso se deja para el día siguiente estará aún más de rechupete.