Una ya tiene una edad y lo de Haloween me es ajeno, me deja bastante indiferente y no entra dentro de mis planes celebrarlo. Sin embargo, ver todos los blogs inundados de referencias y recetas para estas fechas me ha hecho caer en la tentación y contradecirme a mí misma, y sentirme de algún modo obligada a preparar algo que tenga que ver con esta celebración. Y me veo, comprando alguna bobada de referencia para intentar montar el atrezzo de la tarta que he preparado, y llegar corriendo a mi casa para intentar hacer una foto medio decente y pensar de qué puedo hablar y no tener ni idea que contar. Todo esto por una fiesta que ni me va ni me viene y que tiene poco de tradición nuestra. «Quién te entienda, que te compre», que diría mi madre.
Al menos espero que la disfrutemos con gusto.
Ingredientes:
Para la masa quebrada:
200 gr. de harina de repostería
100 gr. mantequilla
10 gr. de azúcar
5 gr. de sal
50 gr. de agua fría
Para el relleno:
400 gr de pulpa de calabaza
200 gr de leche condensada
2 huevos
50 gr. de azúcar moreno
20 gr. de harina de repostería
1/4 cucharadita de sal
1/4 cucharadita de clavo molido
1/4 cucharadita de nuez moscada
1/4 cucharadita de jengibre molido
1 cucharadita de canela molida
Para la decoración:
75 gr. de chocolate negro en trozos o gotas de chocolate
Elaboración:
Para la masa quebrada:
Tamizar la harina junto con la sal y el azúcar
Añadir la mantequilla en tacos, recién sacada del frigorífico y mezclar con los dedos hasta conseguir una textura arenosa.
Añadir el agua fría y mezclar hasta que esté bien ligada, pero intentado no excederse en el amasado.
Colocar la masa entre dos trozos de papel film o de horno y estirarla un poco con el rodillo. Guardar en la nevera durante 1 hora aproximadamente. También se puede hacer una bola y guardarla así, pero a mí me gusta dejarla medio estirada, me parece más fácil, terminarla de estirar después. Si la masa está bien fría, puedes llegar a estirarla y darle forma sin pasar por la nevera.
En el caso de haberla guardado en el frigo, sacar y estirar con el rodillo, procurando que tenga el mismo grosor por todas partes, dándole la forma del molde que vayamos a utilizar.
Para pasar la masa al molde puedes ayudarte del rodillo, enrollándola ligeramente y depositando en el molde. También puedes hacerlo sin el rodillo. Quita el film que cubre la masa, sujeta la masa por la parte de abajo que todavía tiene el film pegado y lleva hasta el molde, da la vuelta con cuidado y coloca la masa en contacto con el molde y despega la otra lámina de film que ha quedado en la masa.
Ir ajustando la masa a las paredes y fondo del molde, apretando con suavidad, pero sin que la masa se estire. Haz una pequeña bola con un trocito de masa, y ayúdate con ella para ir pegándola a los bordes y fondo.
Para retirar la masa sobrante, pasar el rodillo por encima del molde y pinchar la base con un tenedor.
Cubrir con papel de horno y cubrir con legumbres secas.
Meter al horno a unos 180º y hornear alrededor de unos 20-25 minutos.
Sacar, dejar templar y retirar el papel con la legumbres
Para el relleno:
Colocar todos los ingredientes del relleno en el vaso de la batidora o thermomix y triturar hasta que la masa esté bien mezclada y fina.
Verter este mezcla sobre la masa y colocar de nuevo en el horno a una temperatura de 180º entre 30-40 minutos o hasta que al pincharla con un palillo, éste salga limpio.
Para que la masa no se dorase en exceso, mejor cubrir con papel de aluminio y destapar en los últimos 10 minutos.
Decoración:
Sobre una lámina de papel de horno dibujar una especie de tela de araña, teniendo en cuenta el diámetro de la tarta.
Fundir el chocolate en el microondas a intervalos de 30 seg. hasta que esté casi derretido, se terminará de fundir completamente al mezclarlo con la cuchara. No pasarse al programar el tiempo, para evitar que el chocolate se queme.
Echar el chocolate en una manga pastelera y hacer un pequeño corte en la punta.
Ir marcando con el chocolate sobre el papel (por la parte que no hemos pintado) siguiendo los trazo del dibujo que hemos hecho.
Dejar enfriar, despegar del papel con mucho cuidado para que no se nos rompa y colocar sobre la tarta.
Si sois de los que se suman a la moda de celebrar Haloween, os deseo que disfrutéis la fiesta, y si no, disfrutad la tarta.